Los porteros aficionados son los profesionales del mañana 

Tanguy Jourdan, Academia de Porteros

Hoy destacamos una falta de consideración entre el fútbol aficionado y el mundo profesional, especialmente para el puesto de portero. Por eso nos preguntamos cómo afronta el mundo amateur los obstáculos que se le presentan para seguir formando a los porteros aficionados que serán los porteros profesionales del mañana. 

«¿Qué equipos han ganado trofeos importantes? Son los que tienen un delantero potente, pero también un portero decisivo. 

Hoy en día, los porteros desempeñan un papel muy importante en un equipo y pueden cambiar las tornas de un partido. De hecho, un portero puede aportar unos diez puntos en la liga. Para ser decisivo, debe estar preparado en cualquier momento del partido, incluso para una sola acción o una sola jugada a balón parado. 

En la actualidad, los clubes profesionales dependen de los clubes aficionados para descubrir a los mejores talentos, y así poder mantener a sus porteros en lo más alto de su juego. No puede haber fútbol profesional sin fútbol aficionado. Es en este último donde se concentran la mayoría de los porteros y donde la formación está presente. Esto representa un regalo del cielo para las estructuras profesionales.

Falta de consideración en el fútbol aficionado

Siempre hemos estado acostumbrados a ver en la portería al jugador menos técnico y menos atlético del equipo. Este fenómeno ha existido durante muchos años y sigue estando muy presente en el fútbol actual. Hoy en día, los equipos que cuentan con porteros apasionados y comprometidos con su posición son un lujo si quieren obtener buenos resultados a lo largo de la temporada. 

Aunque cada vez son más los jóvenes que se interesan por el puesto, la formación de los porteros en los clubes sigue siendo insuficiente o inexistente. Según un estudio realizado por Gardien de But Développement en la región de Saboya, sólo el 10% (30 clubes de 300) de los clubes disponen de una estructura dedicada al puesto de portero. En consecuencia, los clubes no consiguen que sus porteros desarrollen de forma constante sus prestaciones desde la edad más temprana hasta la categoría senior. 

«Mi portero no ha sido eficaz», «Pierdo partidos por culpa de mi portero», «No tengo portero»: ¿qué se puede hacer ante este tipo de comentarios?

La necesidad de estructurar los clubes profesionales

Desde hace varias décadas, el fútbol profesional es uno de los mercados más importantes del mundo y ha crecido considerablemente. Por ello, los clubes han tenido que estructurarse para responder a las elevadas exigencias del mundo profesional. Más concretamente, en términos deportivos, los resultados influyen en la salud financiera de un club. Para lograr resultados, es esencial contar con un personal de calidad que trabaje de manera óptima con los jugadores. Actualmente, los porteros profesionales cuentan con entrenadores profesionales especializados en su puesto, lo que les permite rendir con mayor eficacia. Los porteros reciben un entrenamiento específico para su posición, así como una preparación física específica, sesiones cognitivas y sesiones de análisis de vídeo. De este modo, el portero puede desarrollarse en condiciones óptimas para lograr un rendimiento deportivo individual y colectivo. Gracias a este enfoque global, los porteros son tratados como jugadores de pleno derecho, junto a los jugadores de campo. 

Gracias a los recursos humanos y, sobre todo, financieros disponibles en el mundo profesional, los porteros disponen de un entorno de trabajo ideal para rendir con su equipo.